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Banco Santander Brasil implementa nuevas medidas en el marco de la crisis por el coronavirus

La filial de Banco Santander en Brasil ha anunciado nuevas medidas para apoyar a sus clientes y a la sociedad durante este período de lucha contra la propagación de la COVID-19. Las iniciativas tienen como objetivo minimizar el riesgo.

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La filial de Banco Santander en Brasil ha anunciado nuevas medidas para apoyar a sus clientes y a la sociedad durante este período de lucha contra la propagación de la COVID-19. Las iniciativas tienen como objetivo minimizar el riesgo para la población de edad más avanzada que todavía necesita acudir a las sucursales, incentivar las compras en línea y ofrecer descuentos en las compras realizadas en farmacias, a través del programa de fidelidad Esfera, de las tarjetas Santander.

En concreto, aquellas sucursales de la filial de Banco Santander en las que se ha identificado un mayor flujo de clientes jubilados y pensionistas han empezado a disponer de horarios exclusivos de atención a la población de edad avanzada, entre las 9:00 h y las 10:00 h.

En otro ámbito, las farmacias asociadas al programa de fidelización de Esfera ofrecerán descuentos del 12% en todas las compras realizadas en línea con tarjetas de Santander. El objetivo es que las personas utilicen los portales de venta de las droguerías, en lugar de salir de sus casas, y ahorren en sus gastos de medicamentos y productos de higiene, entre otros artículos básicos comercializados por estos establecimientos.

Asimismo, el programa asignará el doble de puntos a todas las transacciones realizadas en línea con tarjetas del banco, como otra manera de estimular a los clientes a que cumplan la cuarentena y evitar la propagación del nuevo coronavirus.

Estas acciones de Santander Brasil se suman a otras anunciadas recientemente, como un período de carencia de tres meses para el inicio del pago de las cuotas del capital circulante (prestación ofrecida a las empresas que reciban en su cuenta de Santander el ingreso de las ventas realizadas a través de cualquier TPV) y la exención del cobro de las comisiones de la cuenta corriente para los microemprendedores individuales (MEI) que quieran utilizar ese dinero para pagar las facturas de proveedores de servicios, como el agua y la electricidad, mediante cargos en cuenta o domiciliaciones bancarias de tipo DDA. El período de contratación alcanza hasta el 30 de abril. Los clientes podrán obtener más información sobre estas medidas en el sitio web www.santander.com.br/cuidar.

Otras acciones anunciadas por Banco Santander Brasil son:

Para los clientes: 

• Aplazamiento durante 60 días del pago de las siguientes cuotas de financiación.
• Ampliación automática del 10 % en el límite de la tarjeta de crédito de todos los clientes correspondientes

Para los empleados: 

• El Banco no iniciará ningún proceso de despido en la totalidad del territorio nacional durante el período más crítico de la epidemia de la COVID-19, a excepción de los casos de justa causa o de violación del Código de Ética de la organización.
• Anticipo al mes de abril del pago del 100 % de la paga extra (13.º salario) a sus 47 000 empleados y una línea de crédito a las empresas-clientes que decidan adoptar esa misma medida para apoyar a sus colaboradores.
• Refuerzo en las acciones de desinfección y limpieza en las áreas administrativas y ampliación del número de colaboradores en el sistema de teletrabajo.

Para la sociedad:  

• Importación, en asociación con Bradesco e Itaú, de 5 millones de tests rápidos de detección de la enfermedad, así como tomógrafos y respiradores, para su donación al Ministerio de Sanidad.

A nivel global, el Grupo ha puesto en marcha una serie de medidas para mitigar los efectos de la crisis por la pandemia del coronavirus y garantizar el bienestar de sus clientes, empleados, accionistas y otros grupos de interés. Recientemente, Banco Santander anunció la creación de un fondo de solidaridad de 25 millones de euros para responder a las necesidades médicas más urgentes con el fin de evitar la propagación del virus. Los recursos iniciales se dirigirán, principalmente, a la producción de equipo médico, ropa de protección y otros suministros necesarios para tratar a las personas afectadas.