Esto significa una auténtica revolución en el mundo del juego, que está enmarcada en los cambios tecnológicos en los que está inmersa la humanidad. En este caso, se produjo una migración de los casinos de tierra a los operadores de juego online.
Como suele suceder, estos cambios drásticos implican una vuelta de tuerca en las reglamentaciones. Por su carácter inmaterial, los casinos en línea son mucho más difíciles de regular que los de tierra. Esto ha conducido a numerosas polémicas en torno a la normativa ideal para estructurar el sector.
Si bien en Bolivia aún no hay una legislación que contemple el juego online, el gobierno ha tomado medidas que tienen en cuenta esta actividad. En el seno mismo de estas políticas se encuentra el debate sobre la naturaleza del juego y los dilemas morales que plantea su institucionalización.
¿Es posible jugar online en Bolivia?
A pesar de que no hay una ley de juego online, existen incontables opciones para realizar apuestas en Internet. ¿Cómo reconocer los casinos serios de los fraudes? Hay sitios como estafa.info examinan casinos online operativos en Bolivia.
En otros países, como en España, Andorra y Colombia, existen instituciones gubernamentales que se encargan de emitir licencias para los operadores de juego legales. Estos certificados sirven para identificar los casinos confiables de las plataformas engañosas. Además, esas entidades oficiales realizan estudios e informes para evaluar el alcance del juego en la sociedad.
No obstante, en América Latina la mayoría de los países aún no tienen una ley de juego online. ¿Cómo es posible mantenerse alejado de los fraudes? La respuesta es: a través de los certificados emitidos por las autoridades internacionales de control del juego.
Éstas son instituciones localizadas en el extranjero que se dedican al control y el seguimiento de los casinos online. Su actividad permite establecer patrones homogéneos para brindar servicios de apuestas. Algunas de las entidades más prestigiosas son la Comisión de Juego de Curação, la Autoridad Regulatoria de Gibraltar, la Comisión de Juego del Reino Unido y la Autoridad de Juego de Malta. Sus certificados se pueden encontrar en los mejores casinos que están disponibles en Bolivia.
La situación del juego en el país
A pesar del espacio gris que queda para los casinos online, en Bolivia existen leyes de juego que involucra numerosos aspectos relevantes para esta práctica. Entre ellas se pueden citar la Ley N° 060 de Juegos de Lotería y de Azar de 25 de noviembre de 2010, el Decreto Supremo Nº 0781 y 0782 de 02 de febrero de 2011 y la Ley N° 717 de 13 de julio de 2015.
El punto común a estas normativas es que le atribuyen la potestad del control del juego a la Autoridad de Fiscalización del Juego (AJ), que forma parte del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas. Esta organización controla y supervisa la actividad de los casinos. Entre sus principales ocupaciones se cuentan las siguientes:
- Emisión de licencias para operar
- Fiscalización, inspección y control de la explotación de juegos de lotería, azar y sorteos.
- Clausura de espacios de apuestas ilegales.
- Ejecución de sanciones por la explotación ilegal de juegos de lotería, azar y sorteos.
Si bien esta entidad no tiene competencia sobre el juego online, sus axiomas sientan una base sobre la que se puede construir una normativa para las apuestas virtuales. Según una de las perspectivas sobre el asunto, la reglamentación del juego online podría abrir una posibilidad alternativa de crecimiento para una economía como la boliviana.
Rumbo a la inclusión de los casinos online
Incluso cuando el país no tiene una ley que regule el juego en línea, las autoridades no desconocen su existencia. Por eso es que toman algunas medidas acordes para prevenir al público sobre los potenciales riesgos de las apuestas desreguladas. Por ejemplo, la Autoridad de Fiscalización del Juego suele publicar en su cuenta oficial de Twitter los nombres de los operadores desaconsejables.
Este paulatino reconocimiento de los operadores de juego da lugar para pensar que las autoridades pronto tomarán la decisión de legislar la materia. Algunas voces de la política sostienen que la mejor manera de evitar las webs fraudulentas es prohibir el juego. No obstante, esta medida ha demostrado tener el efecto contrario: sin una ley que establezca parámetros claros, se da lugar a la proliferación de operadores sin regular.
En los próximos años se verán cambios en esta área, y quizás la AJ pueda comenzar a emitir licencias para los casinos online legales de Bolivia.