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Lo mas leído: Blue, solidario, bolsa, Netflix, cripto. Cuántos dólares hay en Argentina

AMERICA ECONOMIA

El primer desafío al escribir una nota sobre los tipos de dólares o, mejor dicho, las diferentes cotizaciones del dólar que existen en Argentina, es que probablemente cuando terminen de leer este artículo alguna cotización se haya modificado o, incluso, haya surgido algún nuevo tipo de dólar.

En primer lugar, hay que comprender que los argentinos hace décadas que ahorran en dólares y que hasta sus propiedades se venden en la moneda estadounidense debido a las profundas crisis económicas y devaluaciones que han atravesado.

Esas mismas crisis han provocado que muchos ciudadanos busquen una forma de ahorro estable y ¿qué más estable que el dólar? Por eso, hasta los niños saben cuántos pesos argentinos les cuesta un dólar. Pero lo interesante es que hace algunos años la cotización no es única y, probablemente, ese pequeño diga la cotización del dólar blue (valor de referencia ilegal y de mayor uso) y no la oficial.

El origen de los diferentes dólares

La existencia de distintos tipos de dólares, formas y cotizaciones se originó debido a las restricciones impuestas por los últimos gobiernos para acceder al dólar legal a través del banco o cualquier entidad financiera.

“Estas restricciones empezaron entre 2011 y 2012; y fueron discontinuadas a fines de 2015, cuando asumió el expresidente Mauricio Macri. Sin embargo, tres años después, Macri tuvo que reinstaurar muchas de esas restricciones por la creciente demanda de dólares que se desató durante esa etapa”, explica Martín Kalos, economista y director de la consultora especializada en temas económicos y político EPyCA Consultores,

Esas restricciones a las que hace referencia el economista son controles cambiarios, que en Argentina suelen llamarse “cepo cambiario”. Entre esas restricciones hay una que establece, por ejemplo, la cantidad de dólares que una persona puede comprar por mes.

“El valor de dólar oficial es el que utilizan las empresas para operar. Aunque el Banco Central permite comprar sin límites a quienes importan mercaderías, existen limitaciones de la secretaría de Comercio Exterior Argentina a través de exigencias burocráticas a determinado tipo de importaciones. El objetivo, en este caso, es facilitar que los dólares estén disponibles para las importaciones de bienes de capital, insumos y materias primas; y no tanto para los bienes de consumo final que pueden producirse en el país. También el pago de deuda pública y privada, y el giro de ganancias de las empresas extranjeras que operan en Argentina se puede hacer a través del dólar oficial. En estos casos es el dólar que el Banco Central le vende a los bancos por este motivo”, explica Kalos.

Para ahorrar, cada persona puede comprar hasta US$ 200 por mes. “En ese caso debe tenerse en cuenta algunas limitaciones, por ejemplo, si una persona viajó y utilizó su tarjeta de crédito en el exterior o si pagó alguna plataforma como Netflix y Spotify, que se pagan en dólares, se descontará del cupo mensual que tienen para ahorrar”, detalla el economista.

Entonces quienes quieren comprar más de US$ 200 por mes deberán utilizar diferentes mecanismos y allí es donde surgen los distintos tipos de dólares.

“Hay tres cotizaciones principales y, después, hay variedad en torno a esos tres. Estos son Dólar Bolsa, Dólar Contado con Liquidación y el Dólar Blue. El Blue es el billete y por eso es el más caro. Para conseguirlo es necesario ir a buscar el billete físicamente en una casa de cambio ilegal que en Argentina se llaman ‘cuevas’ y el cambio, hoy, está cerca de 220 pesos argentinos por dólar, muy por encima de los 110 pesos argentinos por dólar que se pagan en el mercado oficial. Pero esa cotización -la oficial- está restringida a ciertos usos y no muchas personas pueden acceder. El Blue, por su parte, es ilegal porque está prohibido por el Banco Central desde hace varios años realizar transacciones entre privados de compra y venta de dólares”, cuenta Kalos.

Pero hay otro tipo de dólares que sí son legales y que se consiguen a través de compra y venta de acciones o de títulos públicos que se compran en pesos argentinos y se venden en dólares. “Hay bonos argentinos y acciones de empresas argentinas que cotizan localmente en dólares, en pesos y en bolsas del exterior. De esta manera, una persona puede comprar en Buenos Aires un bono en pesos de deuda argentina y venderla en dólares en Buenos Aires. Ese es el llamado Dólar Bolsa o MEP (por Mercado Electrónico de Pagos). Pero también puede comprar bonos en Buenos Aires en pesos y venderlos en Nueva York. En este caso se lo llama Dólar Contado con Liquidación. En ambos casos se compra en pesos y se vende en dólares”, explica el director de EPyCA Consultores.

La cantidad de pesos argentinos que se invierten para recibir dólares Bolsa o de Liquidación dependerá si se venden en Argentina o en el exterior, y, aunque suelen estar más baratos que el Dólar Blue, tienen una cotización bastante más elevada que el Dólar Oficial. Hoy cotizan cerca de los 205 pesos argentinos por dólar.

“En los últimos meses el Banco Central intervino fuertemente en algunos títulos públicos que se estaban utilizando mucho para hacer esta operación, entonces aparecieron dos cotizaciones de dólar Contado con Liquidación, las que se podían hacer a través de los bonos donde el Banco Central operaba, y las que el Banco Central no operaba, siendo esta última un poco más cara”, reconoce Kalos.

Uno a uno los diferentes dólares

Algunos analistas llegaron a contabilizar hasta 15 clases de dólares diferentes en Argentina. Les contamos cuáles son los más conocidos localmente.

-Dólar mayorista. Es oficial y el más barato del mercado. Se comercializa en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), y quienes acceden a este tipo de cambio realizan operaciones de comercio exterior.

-Dólar minorista. También es oficial, pero está afectado por el cepo cambiario. Hoy solo sirve como precio de referencia porque nadie puede acceder a su compra sin pagar impuestos y de allí que surjan diferentes cotizaciones.

-Dólar solidario. Surge de la cotización minorista oficial más los impuestos que aplicó el Gobierno para quienes los compran con intención de ahorrar. Entonces un argentino que quiere acceder a ellos debe sumar a la cotización oficial un 30% de impuesto PAIS y otro 35% de retención a cuenta del pago del Impuesto a las Ganancias. Es decir, un 65% adicional. Además, como contamos, hoy los argentinos solo pueden comprar US$ 200 por mes a través de homebanking.

-Dólar Netflix o dólar streaming. Este es el tipo de cambio con el que se pagan servicios como Spotify, Disney + y Amazon. En este caso se debe sumar un impuesto del 8% a la cotización oficial, más el 35% de impuestos por retención a cuenta de Ganancias. O sea un 43% adicional a la cotización oficial.

-Dólar soja o agro. Se trata del cambio que tienen que pagar los exportadores del campo. Aunque cobran a tipo de cambio de cotización oficial deben sumar impuestos llamados retenciones, que son los derechos de exportación. Algunos productos reciben por cada dólar un 35% menos que la cotización oficial debido a este impuesto. “Entonces si el dólar oficial está a 110 pesos hoy esta firma cobrará cerca de 70 pesos por cada dólar sobre lo que exportan”, ejemplifica Kalos.

-Dólar Contado con Liquidación (CCL). El dólar contado con liqui es una forma legal de comprar dólares. La operación consiste en la compra y posterior venta de bonos y acciones que coticen tanto en el mercado argentino como en el exterior.

-Dólar MEP (Mercado Electrónico de Pagos) o bolsa. Se trata de una operación bursátil que surge a partir de la compra de un bono cuya cotización es en pesos, pero es convertible al mismo bono que cotiza en dólares, realizando la operación de venta en moneda norteamericana. La operatoria concluye con la transferencia de los dólares a una cuenta bancaria local y no es necesario el uso de una cuenta comitente. Esa es la principal diferencia con el CCL. 

-Dólar ADR. Es otra forma legal para adquirir divisas en el mercado financiero y de acceder al CCL, pero bajo un valor diferente, ya que en lugar de operar con bonos se hace a través de la compra y venta de acciones de empresas argentinas que cotizan en Wall Street (ADR). 

-Dólar Blue. El nombre corresponde al significado que tiene en inglés que además del color refiere a algo “oscuro”. Se trata de la cotización más popular del mercado que surgió por las restricciones. Muchos ahorristas que se vieron imposibilitados de adquirir moneda extranjera tuvieron que recurrir al mercado ilegal que funciona en las llamadas cuevas y tiene una cotización que hoy se acerca al doble del valor oficial. 

-Dólar Senebi. Ante esta situación, reflotó la posibilidad de operar con bonos sin límite de monto máximo a través de la operatoria llamada Senebi (Segmento de Negociación Bilateral). Se trata de transacciones que se realizan por fuera del mercado bursátil tradicional y se efectúan en forma bilateral. Por ejemplo, una empresa tiene pesos en Argentina y necesita contar con dólares en el exterior. Lo que hace es buscar a otra compañía que tiene dólares afuera y necesita pesos en el mercado local. Se pacta un precio por el intercambio que no es público y que se rige por la oferta y la demanda. 

 Para operar con este sistema hay un monto mínimo de transacción de un millón de pesos, pero no hay tope. Sin embargo, como en Argentina suele haber mayor interés por girar dólares al exterior, el precio del intercambio en el Senebi suele ser más caro que el valor del CCL.

-Dólar Cripto. Las criptomonedas introdujeron una nueva forma de dolarizarse. En este caso el comprador elige una criptomoneda estable, atada a la cotización de la moneda estadounidense. La operación consiste en vender esta cripto en dólares. 

Más allá de estos tipos de dólares descritos, mes a mes se abren variantes en la medida en que haya más o menos restricciones. En el pasado, a medida que los controles se fueron ajustando, se generó mucho ruido en el mercado, que provocó saltos y distintos tipos de cotización del dólar. “En los últimos meses el mercado estuvo más tranquilo por el crecimiento económico y el principio de entendimiento con el FMI. De todas maneras, Argentina está lejos de salir de la crisis y esta demanda de dólares por parte de la población que tiene poder adquisitivo suficiente para comprar dólares va a seguir generando distintos tipos de dólar”, concluye el economista.