ECONOMíA BOLIVIA
Rentabilidad de AFP sigue a la baja y aleja jubilación con topes

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La rentabilidad que generan las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) continúa a la baja y en 2020 se situó en un promedio de 4% y, según expertos, es una de las causas que    impide jubilarse con los topes establecidos en la Ley de Pensiones 065 para alcanzar una renta igual o mayor al  60% del referente salarial.

El analista financiero Pablo Pinell afirmó que  las AFP sólo pueden invertir en títulos que son autorizados por el Gobierno, a través de  diferentes reglamentos que se han emitido, es decir que no tienen libertad para poder invertir en títulos valor de alta rentabilidad. “En las normas disponen que para salvaguardar los ahorros de los aportantes tienen que invertir en títulos seguros y que tengan riesgo muy bajo, por tanto mientras más alta la rentabilidad del título valor, hay mayor riesgo. Pero, el otro punto es que en el mercado en general los rendimientos de los títulos en los que invierten las AFP ha registrado una baja”, explicó. 

Aclaró que  no es un problema de gestión de las AFP, sino que están “amarradas con una camisa de fuerza”, porque las normas las obligan a invertir en títulos seguros y de  baja rentabilidad.

Según Pinell, para que se mejore esta situación se debe hacer modificaciones a la norma, que es un tema que debe ser evaluado por las autoridades.

En 2020, la rentabilidad de las administradoras BBVA Previsión y AFP Futuro alcanzó a  4,30% y 4,13%, respectivamente. Esto se obtiene de las ganancias obtenidas por la inversión de los aportes de jubilación. 

Para el economista  Javier Terrazas, uno de los puntos neurálgicos que se evidenció en el sistema de pensiones es que la tasa de rendimiento no es controlada por ninguna instancia y es definida  por los mercados financieros.

Por ejemplo, antes de 2010 los rendimientos de las inversiones alcanzaron tasas altas del 12%, pero luego ha ido bajando y actualmente  no supera  el 4%.

Dijo que la única forma de mejorar el rendimiento es a través de la modificación de la normativa, que es donde se define  cómo y dónde se debe invertir.

Terrazas considera que el bajo rendimiento  de las inversiones  ha movido a muchas personas a exigir que se le devuelva los ahorros, porque cuando se les hace el calculo de jubilación, las rentas a percibir son mínimas. 

 “Pese a aportar de manera sagrada, no han sido correspondidos de la misma manera y cuando alguien creía que tenía 100 mil bolivianos en el sistema, sólo había 50.000 bolivianos debido al mal rendimiento”, observó.

 Explicó que esa situación obliga a que  la gente tenga que  trabajar más años o tenga que contentarse con pensiones que son el 20% o el 30% de su promedio salarial, analizó  Terrazas en el Foro Diálogo Dossier  sobre la devolución de aportes de las AFP.

El economista Waldo López, que también participó del foro, coincidió en afirmar que la gente se queja porque la renta de jubilación es demasiado baja con relación al ingreso que tienen, que debería llegar al 60%, pero no es así porque no supera ni el 30%.

“La rentabilidad a nivel mundial ha bajado mucho y si hay  recuperación, es más nominal. Los aportantes hemos tenido pérdidas, sin embargo, las AFP nunca pierden,   ni reciben tasas de interés negativas. Ante esta situación debería hacerse ajustes en la Ley de Pensiones y ahora es cuando hay que debatir”, indicó 

Identificó que otra debilidad  es que los fondos están sujetos a la compra de  bonos del Estado.

De acuerdo con la Ley 065 de Pensiones un asegurado puede acceder a la pensión de vejez solo bajo  tres circunstancias: a) cuando con sus aportes (más el rendimiento de éstos) alcanza a financiar una pensión de vejez de al menos el 60% del promedio salarial de los últimos 24 períodos. En este caso no existe requisito de edad mínima.

b) También se da tras haber hecho aportes al Sistema de Reparto, y accedió a la compensación de cotizaciones más sus aportes al SIP y teniendo la edad mínima de 55 años (varones) y 50 (mujeres) y esto le alcance para   financiar una pensión de al menos el 60% del promedio salarial.

Por último, puede jubilarse si cuenta con 58 años de edad, sin importar el monto acumulado en su cuenta y si posee al  menos 10 años de aportes. Esto será posible  siempre y cuando el valor acumulado le permita financiar un monto de pensión mayor a la pensión solidaria.

 Las rentas bajas es una de las justificaciones que tienen las personas que exigen la devolución de sus aportes a las AFP, además de contar con un ingreso tras quedar desempleados. 

 CC propone  devolución de hasta un 20% y usar saldos

 La bancada de Comunidad Ciudadana (CC) en la Asamblea Legislativa respalda la devolución de aportes de las AFP    y propone que el monto  a retirarse  llegue hasta un 20%.

Sobre la devolución total, CC está en  desacuerdo con que se beneficie sólo a quienes tienen hasta 10.000 bolivianos.

“CC considera que este umbral es discriminatorio y castiga a quienes han sobrepasado dicho umbral y deben esperar varios años para cumplir los 58 años que la ley actual les exige. En este aspecto propone que la devolución sea hasta el 20% del aporte acumulado”, señala.

Además CC sugiere que los asegurados a las AFP  puedan utilizar el saldo no devuelto, como garantía para obtener créditos bancarios, a tasas de interés  accesibles.

La anterior semana, el Ejecutivo remitió a la Asamblea el proyecto de ley para la devolución parcial o total de aportes a las Administradoras de Fondo de Pensiones, que  permite el retiro de fondos en un rango máximo de  15% a 100%.

Para hoy está previsto que el pleno de la Cámara de Diputados haga el  respectivo tratamiento del proyecto de ley.

Entretanto, el senador del MAS  Félix Ajpi señaló ayer que para que    la devolución de los aportes a las Administradoras de Fondos de Pensiones   sea superior al 15% debería hacerse un estudio técnico, según ABI.

“Seguramente los movilizados tienen un planteamiento, no conocemos exactamente su estudio técnico para querer solicitar el 100% o el 50%”, explicó  Ajpi.

El proyecto de ley establece que quienes pidan la devolución de los aportes de las AFP perderán el beneficio del Fondo Solidario que permite mejorar las rentas cuando las mismas son muy bajas al jubilarse.