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Nissan elige al mexicano Iván Espinosa como director ejecutivo para suceder a Uchida

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Nissan, nombró a Iván Espinosa como su próximo director ejecutivo, eligiendo al veterano de dos décadas de la compañía con una profunda experiencia en productos para revivir una marca que alguna vez fue histórica y ahora está empañada por años de escándalo, agitación administrativa y ventas vacilantes.

El nombramiento de Espinosa, de 46 años, ciudadano mexicano y director de planificación del fabricante de automóviles, pone fin a semanas de especulaciones sobre quién sucedería a Makoto Uchida al frente del tercer fabricante de automóviles más grande de Japón.

Espinosa, quien se unió a Nissan en México en 2003 y también ocupó cargos en el Sudeste Asiático y Europa, asumirá el cargo a partir del 1 de abril.

Uchida había estado bajo una creciente presión para dimitir tras el empeoramiento de las ganancias de Nissan y después del fracaso este año de las negociaciones de fusión con Honda según han dicho las fuentes.

No estaba claro si el nombramiento de Espinosa volvería a poner las negociaciones de fusión sobre la mesa o abriría la posibilidad de inversión de otro socio.

El fabricante de automóviles se ha visto gravemente afectado en mercados clave como China, donde actores locales en rápido ascenso como BYD han devorado su participación de mercado, y en Estados Unidos, donde su envejecida línea necesita desde hace tiempo una revisión.

"Es un tipo muy apasionado por los productos", dijo Christopher Richter, analista del sector automovilístico japonés de la correduría CLSA.

"Creo que envía una buena señal de que Nissan quiere darle una mayor prioridad al producto porque la marca Nissan ha estado a la deriva durante mucho tiempo y realmente no ha defendido mucho".

Veterano de la empresa

Espinosa tiene experiencia en planificación y desarrollo de productos y ha gestionado la estrategia y el portafolio de productos globales de Nissan. Ocupa su puesto actual desde abril de 2024, un trabajo que asumió como parte de una reestructuración destinada a acelerar la transición hacia los vehículos eléctricos.

En una conferencia de prensa en línea que siguió al anuncio de la compañía, Espinosa dijo que acababa de ser informado de la decisión y que todavía estaba digiriendo la noticia.
"Podemos desbloquear muchas posibilidades", dijo.

Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de reiniciar las conversaciones con Honda, declinó hacer comentarios.

Nissan ha estado plagada de años de ventas vacilantes y problemas de gestión, y nunca se ha recuperado por completo del golpe a su marca tras la destitución en 2018 del expresidente Carlos Ghosn, quien fue acusado por los fiscales de Tokio de mala conducta financiera.

Durante el ejercicio actual, hasta finales de marzo, ha reducido su previsión de beneficios nada menos que tres veces.

Casi todas las marcas de automóviles tradicionales tienen que competir con los fabricantes chinos de vehículos eléctricos, que han revolucionado la industria con elegantes autos repletos de software. Pero Nissan también está luchando por superar problemas más profundos, como su fracaso en el lanzamiento de vehículos híbridos en Estados Unidos y la agitación que dejó la salida de Ghosn.

Además, enfrenta posibles aranceles sobre los vehículos que exporta a Estados Unidos desde México, un importante centro de fabricación .