BANCOS ESPANA
Los grandes bancos cerraron 1.360 oficinas y recortaron su plantilla en 5.800 empleados

LA VANGUARDIA

Los principales bancos redujeron su red de oficinas en 1.360 y recortaron 5.800 empleados el año pasado, coincidiendo con un año histórico de resultados positivos, con 20.580 millones de beneficios. A cierre de ejercicio, España contaba con 10.500 sucursales y una plantilla de 120.600 trabajadores, según los datos reflejados en los informes financieros publicados por las principales entidades en los últimos días.

Santander contaba con 1.913 oficinas a cierre de diciembre del año pasado, prácticamente la misma cifra que en 2021, y una plantilla de 26.839 trabajadores, un 0,62% más en tasa interanual. BBVA, por su parte, también mantuvo su red en 1.886 sucursales y aumentó un 4,4% su número de empleados, hasta las 25.945 personas.

CaixaBank, en cambio, redujo en 17,89% su red de sucursales hasta las 4.081, frente a las 4.126 que tenía a cierre de 2021, y su plantilla cayó un 11,18% hasta los 40.221 trabajadores. Por su parte, Unicaja cerró 400 oficinas en 2022, lo que supone una disminución del 29,24%, hasta situar su red en las 968 sucursales. El número de empleados a finales de diciembre era de 7.835, un 15,43% menos que en 2021.

Por último, Bankinter mantuvo su red de oficinas en 446 puntos y aumentó su plantilla un 4,58%, hasta los 6.419 empleados, mientras que Sabadell recortó en un 4,60% su número de sucursales, hasta las 1.243, y en un 6,26% su cantidad de trabajadores, hasta los 13.413.

Comparada con la situación de septiembre, la red de oficinas se redujo en 100 sucursales, mientras que el número de empleados aumentó en 300, de tal manera que en el último trimestre se ralentizó el ritmo de cierres y salidas de trabajadores que se había producido en la banca durante los últimos años, informa Europa Press.

Reestructuración empresarial 

Los datos son resultados de la apuesta por la digitalización y las fusiones entre entidades

Los datos son resultado de una reestructuración impulsada durante la pandemia con el objetivo de ganar en eficiencia. Las entidades bancarias decidieron apostar por esta política y ofrecer cada vez más servicios digitales. También las fusiones que se llevaron a cabo en 2021 entre CaixaBank y Bankia y Unicaja y Liberbank han ido encaminadas, en parte, a conseguir sinergias que les permitiesen operar en un entorno cada vez más competitivo.

Un proceso de reestructuración que no ha estado exento de problemas. A principios del año pasado, el jubilado Carlos San Juan inició una campaña para reclamar una mayor atención hacia el colectivo de personas mayores, que tienen por lo general más dificultades para adaptarse a la digitalización. El sector reaccionó con medidas para asegurar esa atención personalizada tanto a los mayores como a las personas con discapacidad.

Brecha digital

Carlos San Juan inició una campaña para reclamar atención a las personas mayores

El entorno rural también se ha visto afectado por el cierre oficinas. Para ello, la banca firmó un acuerdo con Correos para facilitar el acceso de la llamada España vaciada a los servicios financieros y se comprometió a asegurar en un plazo de seis meses al menos un punto de acceso presencial a servicios bancarios en todos los municipios de más de 500 habitantes y, en caso de no conseguirlo en ese plazo, en instalar cajeros genéricos en un plazo adicional de seis meses.