Según explicó Insfrán en una entrevista concedida a Última Hora, lo que acontece es una suerte de efecto en cadena que afecta a los consumidores, particularmente en el comercio de frontera. Ocurre que, conforme a lo que señaló el funcionario del Central, la mayoría de los bancos locales no tienen forma de enviar directamente sus dólares a EEUU, por lo cual deben acudir a empresas que operan en Brasil o Argentina, las cuales demandan billetes en condiciones determinadas.

De esta manera, los billetes en malas condiciones o de series viejas no son aceptados en los países vecinos, lo cual a su vez motiva a los bancos locales a rechazar estos papeles, teniendo en cuenta el costo importante que genera para los bancos almacenar ese dinero. “La exigencia de billetes nuevos que los bancos imponen a empresas o comercios en Ciudad del Este y estos a sus clientes no es un capricho ni del comercio ni el banco, es del cliente argentino o brasileño que está demandando ese billete”, refirió.

A todo esto se suma que la Ley 6.588 establece el 1% sobre el valor de la operación como tope a cobrar por los bancos por depósitos en efectivo de moneda extranjera, añadió.

Parche. Insfrán detalló que el problema, en parte, será paliado con la recepción de billetes por parte del BCP. Sin embargo, el proceso para que la entidad reciba los dólares en efectivo todavía no está cerrado, ya que falta resolver aspectos operativos.

En la actualidad se está finiquitando el llamado a licitación para la contratación de un seguro que servirá para respaldar los billetes a ser recibidos, lo cual se daría a conocer esta semana. Asimismo, queda decidir otros puntos como, por ejemplo, definir qué hacer con los billetes.

“Nunca, en nuestros 78 años de vida institucional, operamos en dólares y es una transformación que no se puede hacer de la noche a la mañana. Hay que hacer lugar en la bóveda, contratar seguridad, un seguro, contratar un banco corresponsal, ver qué banco corresponsal, ver qué empresa va a llevar los billetes (al extranjero) porque no se pueden quedar en la bóveda”, detalló.

Para el gerente general del BCP, el problema de fondo se solucionará cuando las empresas que exportan los dólares operen directamente en Paraguay, enviando desde aquí a Estados Unidos, donde la Reserva Federal acepta cualquier tipo de billete legal, sin importar un leve deterioro o la serie.

Esto dependerá en gran parte de la aprobación por parte del país de la evaluación mutua de Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat), consideró. “El problema seguirá hasta que las empresas (que se dedican al efecto) estén interesadas a venir a llevar billetes de Paraguay”, comentó.